Perfil Público de caminamu
Camila Namuncura
Un poco sobre caminamu
Estadísticas
¿Cómo conseguir puntos?
Puedes obtener puntos y subir en nuestro ranking en función de estos criterios:
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
Puntos
Día 55.36
Puntos
Semana 55.36
Puntos
Mes 55.36
Puntos
Año 0
Seguidores
4
Seguidos

Te cuento
que escucho poesía
para volver a mí.
Me ayuda un poco
a desenmarañar.
Emociones, qué más.
Sensaciones.
Pensamientos raros.
Son conversaciones.
Y yo,
no estoy incluida.
Te cuento igual
lo que escucho ahí.
Son incoherencias
muy coherentes.
Lo veo también,
es una locura.
Veo como aparecen.
De la nada, se crean.
Están ahí sabés,
flotando en colores.
Es un show de luces.
Las palabras explotan
como si una
reflejara miles
y como si en vez de hablar,
cantaran.
Se multiplican
descontroladamente,
hermosamente.
Hace que te sientas
afuera de tu piel.
Yo lo veo
y te lo cuento
en versos escritos
con todo el deseo
de que sientas,
aunque sea un poco,
lo que es escuchar
poesía dentro tuyo.

La luna me obsequió
el hábito de escribir sin tinta
en rincones sofocados
y difíciles de airear.
El sol encontró sombras
que reclamaban su luz
y con un poco de fuego
las transformamos en altar.
Se desnudaron mis manos
y dejaron ver que dentro mío
habitaban los aullidos
de una jauría insaciable.
Me abrí a la transparencia
y abracé el tormento
de desgarrar esa piel
que alguna vez me acobijó.

¿Te acordás cuando el concepto de simple me parecía demasiado complejo para vivirlo en coherencia? Pensar que ahora lo racional perdió autoridad y que en mi versión más valiente elijo la simpleza como lo esencial para habitar este cuerpo salvaje.

Conocimos mi peor versión
y a vos un poco te sedujo.
Yo quería gustarte,
más que gustarme a mí.
Abrí una puerta
de la que sólo se salía
y pude ver el espacio
que había en lo vacío.
Naufragué en arena modeviza
y me hundí resistiendo,
pensando que morir en lucha
era más leal que rendirse.
Corrí pasillos interminables
para intentar llegar a vos,
pero más me acercaba,
más me alejaba.
Solté un mundo
para agarrar otro
y de tanto apretarlo,
lo rompí.
Estallé en colores
y viaje en trozos de tierra,
como si creyera que la nada
tiene potencial de todo.
Terminé creando
un universo dentro mío
y me desarmé en infinito
para compartirme en expansión.
Ahora te escribo esto
con un deseo visceral,
de que recuerdes
y estalles conmigo.
Sinceramente,
va a doler,
aunque,
amorosamente.

Narro poemas pensando en vos con la esperanza de que cuando vos escribas, mis palabras se te acerquen al oído.
Quiero saber si cuando te veo en mis sueños
vos también sentís el roce de mi piel acariciándote los huesos.
Siento el calor de tus manos tocando las mías cada vez que los números relatan novelas de amor en voz baja.
Cuánto más tengo que desear para poder vibrar en las mismas frecuencias y que en alguna descarga eléctrica nuestra energía se eriede.
Se prende fuego todo cuando cerramos los ojos estando a distancia y nos encontramos igual a través de un contacto visual.
Tengo la certeza de que cuando camino senderos sentís los aromas que respiro, y es que el perfume de la tierra, siempre llega a las narices que atesoran la osadía de sentirlo todo.
Qué dulce confirmación es camuflarnos entre la inmensidad de las montañas y escuchar cómo revolucionan esos universos que militan el amor.

Desvanecerme en un abrazo que me limpie la tristeza escuchando mis latidos.
Una caricia en el hombro que me permita encontrar el dulzor de mis pómulos salados.
Un nido de sábanas blancas y frazadas felpudas que refugien esta piel que se habita en alerta.
Una taza de té que abrigue mi garganta como lo hacían los pañuelos de algodón con los que me envolvía el cuello papá.
Una mano tibia que apriete la mía cuando mi cuarto se inunde y mi ropa mojada me enfríe los pies.
Un suspiro donde mi pierna se encime sobre otra para sentir la calidez de una piel templada diciendo que me quiere.
Un beso en mi frente que arrope mis heridas sin intenciones de curarlas pero con todo el amor para atravesar mis barreras y validarlas.
Unos dedos que me trencen el pelo sin ajustarlo demasiado para sentir cómo es la ternura de cuidar un rostro rojizo y desbordado cuando lo amás.
Una vela que caliente mi mirada y me muestre lo sagrado de estar sola incluso esas noches en las que me da miedo la oscuridad.
Me gusta que me amen con suavidad, me gustan las caricias que te hacen llorar.
EL SUSURRO DE LA VIDA
¿Prefieres morir o hablar,
o entregar tu voz al viento?
Silencio que quema el alma,
miedo que ahoga el aliento.
Algunos dieron su vida
por poder en paz murmurar,
pero hoy hay otros
que parten su pan sin dudar.
La sombra se te acerca,
el tiempo no espera,
¿que vale más: vida o palabra,
o darle voz a quien no espera?
¿O prefieres ver tu eco arder
como estallidos de cañón,
iluminar la oscuridad
con el fuego de tu voz?
Si callas, la muerte será tu alfombra,
si hablas, quizá el mundo te escuche...
pero el eco de tu grito
en la eternidad cruje.
Elige, no hay vuelta atrás,
lento, seguro, sin piedad:
tu vida ya es el abismo
que grita, ¿verdad o brutalidad?
¿Prefieres morir o hablar?
o quizá....
solo respirar
hasta que el aire
te obligue a contestar.
Enviado por aitanaahd
¿Que hace una abeja en un gimnasio? !zumba!!!
Atracción sexual y deseo por la inteligencia o por las cualidades morales de una persona.
Lucio Benitez
Arribó
Y ahora vengo sin destino
Danilo Quijano
EL SUSURRO DE LA VIDA
¿Prefieres morir o hablar,
o entregar tu voz al viento?
Silencio que quema el alma,
miedo que ahoga el aliento.
Algunos dieron su vida
por poder en paz murmurar,
pero hoy hay otros
que parten su pan sin dudar.
La sombra se te acerca,
el tiempo no espera,
¿que vale más: vida o palabra,
o darle voz a quien no espera?
¿O prefieres ver tu eco arder
como estallidos de cañón,
iluminar la oscuridad
con el fuego de tu voz?
Si callas, la muerte será tu alfombra,
si hablas, quizá el mundo te escuche...
pero el eco de tu grito
en la eternidad cruje.
Elige, no hay vuelta atrás,
lento, seguro, sin piedad:
tu vida ya es el abismo
que grita, ¿verdad o brutalidad?
¿Prefieres morir o hablar?
o quizá....
solo respirar
hasta que el aire
te obligue a contestar.
Enviado por aitanaahd
¿Que hace una abeja en un gimnasio? !zumba!!!
Atracción sexual y deseo por la inteligencia o por las cualidades morales de una persona.
Lucio Benitez
Arribó
Y ahora vengo sin destino
Danilo Quijano