Perfil Público de jeffer_1
Jefferson Jaya
Un poco sobre jeffer_1
Estadísticas
¿Cómo conseguir puntos?
Puedes obtener puntos y subir en nuestro ranking en función de estos criterios:
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
Puntos
Día 1.36
Puntos
Semana 1.36
Puntos
Mes 192.10
Puntos
Año 16
Seguidores
6
Seguidos
Te Amare
En un mundo vació
Donde nada encontraba
Me enamore una persona sin pensarlo
Y así mismo te amare
las rosas que hoy te entrego
lo hago de corazón
como símbolo que te amo mi amor
para que algún día que no este
me recuerdes y por todo eso te amare
Madre querida tan linda
como el despertar de la mañana
iluminas mi alma por que te
amo madre mía
tu me diste la vida
y es lo que mas importa madre mía
solo te aclamo este poema
para decirte que por ti
soy capaz de dar mi alma y mi vida :)
Pasaba por momentos difíciles
sin saber que hacer
de pronto te mire
y me enamore en tu
Hermoso amanecer
contigo siento que tengo
un mundo por que vivir
y una viva infinita
por que sonreír
cuando te vi
me enamore
Y ahora que no tengo
siento que moriré
ya no siento la brisa
que corre por ser
solo se que te extraño
y jamas olvidare
Querida amiga solo quiero decirte
que tu eres como las aves
que vuelas y vuelas
y solo te asientas donde hay verdaderas amistades.
tu siempre me has apoyado
en momentos de triste y de dolor
por eso yo quiero agradecerte
recitando este poema en tu honor
Ya me despido para no hacerte llorar
porque si lloras quiero que sea de felicidad
y una amiga como yo siempre voy a valorar :) .
Mi mundo existe porque tu estas aquí
y solo me quedo pensando
que tu eres mi mayor bendición
porque que te amo y este poema te dedico con todo
el corazón
EL ANCHIMALYÉN
EL ALCHIMALYEN
“Voy a contar esta historia
ahora que vaciamos el plato
sobre el Santos Carcamán
el hermano del Carcato.
Entre historias e historias
del Santos Carcamán se decía
que, dentro de su propia casa
al Alchimayén escondía.
Era el Alchimalyén
casi un espíritu humano
construido sobre la vida
de algún hijo o un hermano.
Cuando era pequeña guagüita
en un cántaro se encerraba
y allí pasaba su vida
con sangre se le alimentaba.
Y, de la sangre, él obtenía
el alimento que necesitaba
con todo lo nutritivo
que esa sangre acarreaba.
Iba adoptando la forma
del envase que lo contenía
y no podía liberarse
por más empeño que hacía.
Un principal de la familia
tomaba esa decisión
y así condenaba a un cristiano
a vivir en menuda prisión.
Y nada de eso que se hacía
que fuera por pura maldad
pues, tener un alchimalyén
traía riqueza y prosperidad.
Respecto del Santos Carcamán,
su padre se lo había heredado.
Para cuando comienza esta historia
se le había sublevado.
Amenazaba con atacarlo
pasaba los días llorando
cada día pedía más sangre
y ya no estaba quedando.
Ya se estaba haciendo imposible
guardado en secreto mantenerlo
era sólo cuestión de tiempo
para que alguien pudiera verlo.
Y la tradición decía
que eso no podía ocurrir
pues, si alguien lo descubría,
el dueño debía morir”.
Esta historia contó mi padre
a la orilla del fogón
recién que habíamos almorzado
lo recuerdo con precisión.
Quien pasara frente a su casa
fueran desconocidos o amigos
una luz estaba siempre encendida
de eso todos somos testigos.
Su dormitorio frente a camino
con la luz siempre encendida
con una ventana abierta
el hombre cuidaba su vida.
Bertoldo Herrera Gitterman
Nueva Imperial 2023
Enviado por beache
KETCHUP
¿Qué hace una persona con un sobre de ketchup en la oreja?
Escuchando salsa.
Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.
Sófocles
QUINTO PISO (FRAGMENTO)
Tanto cielo, tanta luz
¿quién me observa desde allí?
tantos ríos, tanta sed
tanta prisa por llegar.
Ricardo Arjona
EL ANCHIMALYÉN
EL ALCHIMALYEN
“Voy a contar esta historia
ahora que vaciamos el plato
sobre el Santos Carcamán
el hermano del Carcato.
Entre historias e historias
del Santos Carcamán se decía
que, dentro de su propia casa
al Alchimayén escondía.
Era el Alchimalyén
casi un espíritu humano
construido sobre la vida
de algún hijo o un hermano.
Cuando era pequeña guagüita
en un cántaro se encerraba
y allí pasaba su vida
con sangre se le alimentaba.
Y, de la sangre, él obtenía
el alimento que necesitaba
con todo lo nutritivo
que esa sangre acarreaba.
Iba adoptando la forma
del envase que lo contenía
y no podía liberarse
por más empeño que hacía.
Un principal de la familia
tomaba esa decisión
y así condenaba a un cristiano
a vivir en menuda prisión.
Y nada de eso que se hacía
que fuera por pura maldad
pues, tener un alchimalyén
traía riqueza y prosperidad.
Respecto del Santos Carcamán,
su padre se lo había heredado.
Para cuando comienza esta historia
se le había sublevado.
Amenazaba con atacarlo
pasaba los días llorando
cada día pedía más sangre
y ya no estaba quedando.
Ya se estaba haciendo imposible
guardado en secreto mantenerlo
era sólo cuestión de tiempo
para que alguien pudiera verlo.
Y la tradición decía
que eso no podía ocurrir
pues, si alguien lo descubría,
el dueño debía morir”.
Esta historia contó mi padre
a la orilla del fogón
recién que habíamos almorzado
lo recuerdo con precisión.
Quien pasara frente a su casa
fueran desconocidos o amigos
una luz estaba siempre encendida
de eso todos somos testigos.
Su dormitorio frente a camino
con la luz siempre encendida
con una ventana abierta
el hombre cuidaba su vida.
Bertoldo Herrera Gitterman
Nueva Imperial 2023
Enviado por beache
KETCHUP
¿Qué hace una persona con un sobre de ketchup en la oreja?
Escuchando salsa.
Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.
Sófocles
QUINTO PISO (FRAGMENTO)
Tanto cielo, tanta luz
¿quién me observa desde allí?
tantos ríos, tanta sed
tanta prisa por llegar.
Ricardo Arjona