Perfil Público de leog72
Leobet García López
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Ajena estaba la ciudad
a los desolados prejuicios.
Lejos de nosotros
cuánta miseria en las luces
que dejamos atrás.
Tanto miedo a cuestas,
viejas leyes nos rondan
y hay quienes murmuran
y luego regresan,
la escalera sigue intacta
y nos aguarda sin rencores,
acosados después por el desorden público
de transeúntes rabiosos,
fuegos multicolores de autos atrasados
a la presunta jornada
de inolvidables amaneceres,
el claxon que interrumpe la marcha del perro
que se cuida del muro mientras orina.
Una muchacha enamorada
se pierde calle abajo
con su cesta.
Pero un edificio se derrumba
en las agujas que dan al puerto.
Otra muchacha viene,
se acerca y muestra
sus senos
hasta la madrugada.
Un niño en la calle me mira
mientras descuida su pelota.
Laten ruidos intranquilos,
murmullos que me nacen del alma
y después escribo tu nombre.
Se abre una puerta
y mis manos sangran
sobre este papel sediento
que truena en el aguacero.
Aunque bajo el amor
duerma profunda la sed
de viejas prostitutas
que se anunciaron en los diarios
del país vecino.
Amores baratos
que dejan huellas en el camino
mal andado de la vida,
botellas a medias
en tu cintura,
mesas y desorden
sobre tus nalgas
y borrachos de ocho centavos
por noche
detrás de cada puerta.
Guitarras gastadas
en la siempre misma canturía.
Sé que le queda poco a mis pies
frente a este tribunal público
y hay cuchillos que me buscan.
Presiento violencia
sobre estos carros de basura,
mis ojos despiertos
tocan puertas trasnochados
y no encuentro refugio.
Está llegando otro amanecer
y crujen bisagras
que dan al cadalso,
cuervos que se tutean
mis pedazos
en barajas que no enseñan la ciudad,
me queda despertar
y las torres se alzan
buscando el cielo.
última tabla de salvación
pero las brujas me dejan
hereje
en este festín.
Ya tiré el último cigarro
y me busca la gitana
que mueve las cartas
y habla de caminos y ríos
después que la ciudad ha muerto.

Al norte de tus piernas
tengo una casa dónde pongo
a calentar mi cuerpo y mueren
las distintas estaciones de los inviernos.
Abierta está la puerta que un día
cerraste a la multitud.
Te conozco y la noche trae tu aliento.
Los huesos se alborotan , la distancia
se evapora cuando se encuentran
Nuestros labios condenados
a beber del sudor ,la sal dulce al final
de un grito.
Hace tiempo que ensayamos una aventura
de salivas.
Lenguas peregrinas en los insomnios del deseo.
Muslos profanados en las puntas pasionales
de las agujas.
Derrames incongruentes en los salientes
dilatados de tu sexo.
Al norte de tus piernas desplegadas auroras
me recuerdan que un siglo es un segundo,
que el fuego es la llama sin quemar
de los quejidos.
El naufragio es respirar con los ojos cerrados. El temblor la piel rupestre en los salientes de tu isla.
Al norte de tus piernas he descubierto fósiles de pantanos, y aún prolongo hundimientos. Torrentes de nata se suicidan.
Morir es un golpe horizontal propulsado por tus caderas
QUIEN ES?
Que alguien le diga que se calle, que no siga, que no insista, que no hay espacio, que no es importante, ha gritado tan fuerte que te acostumbraste a su llanto, ha estado tando ahí que que su sombra es un mueble, ha sido tan utilizado qué no es humano, ha sido tan persistente que ya no notan qu esta aquí, ha estado tan abajo que no recuerda haber estado arriba, ha sido tan silenciado que sus gritos temen ser escuchandos, ha esperando que le encuentres tantas veces que dejó de esconderse, ha estado sentado tanto tiempo que teme ser elegido, pero ahora donde esta? Donde estoy? Yo? Yo sigo aquí temiendo haber sido de esos que algún día fueron alvidados.
Enviado por juli897
PARECIDO
¿En qué se parece la Playstation y los pechos?
Pues en que ambos son para los niños, pero casi siempre son los hombres los que terminan jugando con ellos.
Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión.
Nelson Mandela
La gente me dice que es grosera.
La gente me dice que no tiene futuro.
La gente me dice que esta desaliñada.
La gente me dice que es caso perdido.
Pero ¿Porque?...
Nunca me dijeron de su sonrisa.
Nunca dijeron de su delicadeza.
Nunca dijeron de sus ojos y la bondad con la que miran.
Nunca dijeron de sus sueños.
Nunca dijeron de como ama la vida.
Y SOBRE TODO....NUNCA DIJERON QUE ME ENAMORARÍA DE ELLA.
Nelson andres Lozano yara
QUIEN ES?
Que alguien le diga que se calle, que no siga, que no insista, que no hay espacio, que no es importante, ha gritado tan fuerte que te acostumbraste a su llanto, ha estado tando ahí que que su sombra es un mueble, ha sido tan utilizado qué no es humano, ha sido tan persistente que ya no notan qu esta aquí, ha estado tan abajo que no recuerda haber estado arriba, ha sido tan silenciado que sus gritos temen ser escuchandos, ha esperando que le encuentres tantas veces que dejó de esconderse, ha estado sentado tanto tiempo que teme ser elegido, pero ahora donde esta? Donde estoy? Yo? Yo sigo aquí temiendo haber sido de esos que algún día fueron alvidados.
Enviado por juli897
PARECIDO
¿En qué se parece la Playstation y los pechos?
Pues en que ambos son para los niños, pero casi siempre son los hombres los que terminan jugando con ellos.
Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión.
Nelson Mandela
La gente me dice que es grosera.
La gente me dice que no tiene futuro.
La gente me dice que esta desaliñada.
La gente me dice que es caso perdido.
Pero ¿Porque?...
Nunca me dijeron de su sonrisa.
Nunca dijeron de su delicadeza.
Nunca dijeron de sus ojos y la bondad con la que miran.
Nunca dijeron de sus sueños.
Nunca dijeron de como ama la vida.
Y SOBRE TODO....NUNCA DIJERON QUE ME ENAMORARÍA DE ELLA.
Nelson andres Lozano yara