Perfil Público de macleod
César Angel Nieves Cruz
Un poco sobre macleod
Estadísticas
¿Cómo conseguir puntos?
Puedes obtener puntos y subir en nuestro ranking en función de estos criterios:
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
- 15 puntos por cuento subido
- 10 puntos por poema subido
- 8 puntos por chiste subido
- 5 puntos por frase subida
- 1 punto por cada seguidor
- 0.02 puntos por voto positivo recibido
- -0.02 puntos por voto negativo recibido
Puntos
Día 22.64
Puntos
Semana 22.66
Puntos
Mes 42.80
Puntos
Año 2
Seguidores
0
Seguidos
No quisiera decir tu nombre
por equivocacion,
o porque ya mi boca
se ha acostumbrado
a nombrarte,
porque me duele
en el alma,
acordarme de ti.
Cada sílaba nombrada,
cada temerario parpadeo
cada movimiento involuntario
tiene un oscuro destino tuyo.
Vives escondida
en cada espacio
de mi cuerpo,
inadvertida pasas,
entre mis sueños
más profundos
y aún sigues ahí.
Me atormentan
tus fantasmas
tu perfume,
tu sonrisa,
tu rostro,
tus recuerdos.
¿ Tus recuerdos ?
¿adónde irán por cierto?,
¿en el corazón? ,
solo cabe el dolor,
¿en el alma?,
solo cabe el sufrimiento,
¿adónde irán , adónde
si algún día me acuerdo?
Más tú ,
te muestras arrebatada,
como una tormenta
destruyes mi mundo,
me dejas en ruinas,
devastado,
a un pie del gran abismo;
me dejas solo,
desnudo,
sin importarte nada
y tan solo te vas .
Madre , llevaré en mi espalda ,
el peso hueco de mis culpas ,
llevaré tu amor y tu ternura
aún cuando de pena
se me queden atragantadas
aquí en la garganta .
Y cuando llegue el mañana ,
de aquel día oscuro y triste ,
mi corazón te lo llevaras robando
a la blanca sepultura ;
y los dos nos moriremos ,
tú de agonía y yo de pena .
Y así iré caminando y caminando
por este mundo extraño ,
que no sé a dónde me llevará ,
ni a que lugar exiliado conoceré ,
llegaré con la tristeza en mis zapatos , llegaré y tú no me recibirás .
Y en cambio yo
conoceré de tu ausencia ,
que dolerá más que la muerte , almorzaremos juntos , pero distantes almorzaremos aunque ya no te vea ,
un gran plato frío de tristezas .
Y desde luego qué hondo vacío
se sentirá en mi mesa ,
que hasta los cubiertos han de llorar
la orfandad de todas las tardes ,
que hasta mi sonrisa se ha ido vivir
al lugar en donde reposan tus labios,
madre.
¡Adiós y hasta nunca!,
fue una despedida tan corta
y los segundos más tristes.
¡Y todo pasó!,
aunque mi corazón
se quedó pensando
cómo será la vida
ahora que te fuiste.
No me quise imaginar,
pero cuando me di cuenta
de la realidad, entendí,
porqué un hombre llora,
porqué está tan sola la alcoba,
porqué la soledad embriaga
y por qué la melancolía de pocos
te mata.
¡Y todo pasó!,
aunque mis ojos
con unas espesas lágrimas
que recorrían mis mejillas,
veían como te alejabas.
Entonces le pedí a mis ojos
que vuelvan a ver
por última vez tu rostro
y a mis labios;
no volver a pronunciar
tu nombre.
Y tu recuerdo se alejó,
así como tu presencia
se fue desapareciendo
entre los árboles y las flores,
entre tu adiós y tu despedida,
entre mi dolor y mi alma perdida.
Amor en silencio,
que guarda en secreto tu nombre.
Que discute con el viento,
las amargas notas de tu ausencia.
Que te espera en el tiempo,
para que de mi te enamores.
Que besa tu sombra
y acaricia tu olvido.
Amor que sufre,
que calla y llora.
Como un barco que encalla
sobre el peñasco que esconden
las olas.
Amor que enmudece
y no dice nada.
Amor que en la eterna lluvia
disimula sus lágrimas.
Ese es mi amor,
que se turba en tu mirada
y se pierde en tu perfume,
que se asoma por la ventana
cuando pasas por la calle
y en silencio llora de rabia.
APENAS
Hace apenas unos minutos yo era un niño,
arcilla de lava que entonaba una canción,
un rugido interminable, una primavera
entre arrecifes de hormigón.
Mis sueños apenas me cabían en las manos,
y la esperanza iniciaba su reinado.
Recuerdo haber alzado los ojos,
rendirme al amor,
coronarme en esa patria de hierba y luz
que desde el barro desafiaba al sol.
Brote, esbozo de estrella en una calle,
música, centella, pasión.
Recuerdo haber sido aquel niño,
y ahora solo quisiera volver a ser yo.
Enviado por danteverne
- ¿Algún doctor en el avión?
- Yo soy doctor, ¿qué pasa?
- ¡Un infarto!
- Soy doctor en filología inglesa...
- ¡Va a morir!
- He is going to die.
¡ La Luna de Capricornio me besó,
y con su inmensa luz me alumbró !
Mayte Rueda Suarez
DENTRO
Yo sé que existo
porque puse una mano sobre tu vientre
y sólo tú estabas dentro.
Claudio Rodríguez Fer
APENAS
Hace apenas unos minutos yo era un niño,
arcilla de lava que entonaba una canción,
un rugido interminable, una primavera
entre arrecifes de hormigón.
Mis sueños apenas me cabían en las manos,
y la esperanza iniciaba su reinado.
Recuerdo haber alzado los ojos,
rendirme al amor,
coronarme en esa patria de hierba y luz
que desde el barro desafiaba al sol.
Brote, esbozo de estrella en una calle,
música, centella, pasión.
Recuerdo haber sido aquel niño,
y ahora solo quisiera volver a ser yo.
Enviado por danteverne
- ¿Algún doctor en el avión?
- Yo soy doctor, ¿qué pasa?
- ¡Un infarto!
- Soy doctor en filología inglesa...
- ¡Va a morir!
- He is going to die.
¡ La Luna de Capricornio me besó,
y con su inmensa luz me alumbró !
Mayte Rueda Suarez
DENTRO
Yo sé que existo
porque puse una mano sobre tu vientre
y sólo tú estabas dentro.
Claudio Rodríguez Fer