Perfil Público de piojodelrojo
Victor Peralta
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Puntos
Día 1.18
Puntos
Semana 1.18
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Mes 120.60
Puntos
Año 7
Seguidores
1
Seguido
Aún porfía en mi memoria los detalles de aquel momento,
y mis pupilas siguen ardiendo con el calor de aquel verano
Ahí estabas,
aguardando en el rincón del bar,
ahí, en la parte más remota del tumulto
de las almas que descienden a vivir sin escala.
Ahí estabas,
con tus cabellos fugitivos,
abrumados de tanta perfección,
y con tu voz dormida en el umbral
de unos labios poderosos
que guardaban en su carne
mi condena infinita.
Ahí estabas, amor, ahí
con los ojitos perdidos,
diseminando el temor en un creerte inocente
y preguntando a la gente si el sentir
se ha prohibido.
¿Y yo, dónde estaba?
Ese día no existía,
pero te vi, vida mía, te vi,
y mi renacer fue todo caos
y el sol parió el amanecer en mis mejillas,
y el atardecer murió en tus brazos,
…mi eterna romería;
Y hoy que todo es efervescencia vida mía,
¿dónde estamos?
Yo,
viviendo todavía en la memoria de aquel día,
¿y vos?,
vos, sumergida en el tumulto
ese que te acercó una vez...
pero que hoy te arrebatan de mi. -
El mar me anticipa, y en unos metros ya había besado sus pies, sus muslos, tambien habia rodeado sus caderas con fuerza, y con algo de debilidad seguía besando el resto de su bronceado cuerpo semidesnudo…
Entre toda esa corriente natural, que seguía conquistando el terreno de su cuerpo en forma ascendente, poco a poco y con la ayuda del descuido de las olas, logré anclarme a centímetros de su mirada, aguachenta, nublada…
fueron 5 segundos los que necesité para recobrar el aire que la corriente me había quitado, 5 segundos para que mis manos reaccionaran y rozaran sus brazos, ya cenizas, pero todavía abrasadores, fueron otros tantos segundos más para que pudiera sentir sus manos sobre mis hombros. El peso de nuestra respiración pareciera haber alisado el mar… y el tiempo, la temperatura y el aire se detuvieron. Los segundos ya no contaban, toda el agua en su cuerpo olvidó su curso y quedó imantada a su piel, adoptándola como su nuevo mar. Mis manos ya estaban sumergidas en su cintura, sus pechos marcaban como un hierro candente mi piel… ya nada podía detenernos, me incliné suavemente con los ojos abiertos y apunté mis labios al centro de los suyos, no hubo acierto, el beso comenzó casi al limite con su mejilla izquierda, pero rápidamente corregí o corregimos al unísono la dirección de nuestras bocas. Sentí una suave presión de la totalidad de sus labios sobre los míos, ella con los ojos cerrados se dejó llevar, brevemente intento dibujar, rozando con más destreza que ligereza, las fronteras de sus besos, jugando con las gotas de agua que todavía quedaban estancadas en su pronunciado labio superior... pero no aguanto... no soporto más el frío lejos de la profundidad de su boca y me vuelco con tal fuerza que las gotas de agua que aún quedaban en nuestros rostros se esparcen a varios metros, fue una explosión de ansiedad, y no tardo mucho en darme cuenta que me está devolviendo el beso con las mismas ansias. La falta de aire hace que nos separemos, ella se siente tan débil después, que se apoya en mi pecho para no hundirse en el océano.
- Todavía seguís con esa loca idea de irte? - Le susurro, mientras dejo caer su cabeza en mi hombro -. No es justo.
- La vida no es justa... - sentenció -
Victor Peralta
Encontrar tus dedos entre mis manos
lanzarnos a la lluvia
casi desnudos, sin escudos
las caricias y el agua
todo es refrescante.
Nos observan, reímos,
somos jóvenes, nos queremos..
amamos la lluvia y todo lo que borra.
la simpleza de las gotas,
su evaporación en nuestros hombros.
seguimos riendo...
Somos nuevos otra vez.
No quiero ser el mismo que era antes...
porque ya lo fui.
V.P.
Te escucho en un ratito me dijo, con voz animada, y esas palabras fueron mi ultimo aliento.
Victor Peralta
Un abrigo de guitarra
acudiendo a la ausencia del sol
en un desorden matinal
cercano al recuerdo de su fervor
el ventanal empañado,
un jardín sin escudos
colmado de gorriones desafinados.
La densa nube, el aire húmedo
la ineludible lluvia...
La bocina de un auto, el apuro de sus pasos
un beso tibio a la pasada.
Un adiós apagado, una silueta sin nombre
La lluvia desatada...
Un mensaje nuevo, un contacto más.
de un corazón sin contactos...
Victor Peralta
EN UNA ISLA LEJANA: UNA FLOR
EN UNA ISLA LEJANA: UNA FLOR
Más allá de estos cielos, muy lejos de aquí
donde el sol se oculta durante la noche
a recargar sus pilas, a llenarse de luz
y poder continuar con su diario derroche.
Había una pequeña isla solitaria
que el mar con todas sus aguas bañaba
partiendo las rocas que la recubrían
llevando la chica, la grande quedaba.
Un ave volando se hallaba cansada
al ver esa isla se dirige hacia allá
llevaba en su pico pequeña semilla
si la come en el vuelo, se le caerá.
Posó como siempre en la parte más alta
donde suele encontrarse la roca más dura
y al intentar comerse la pequeña semilla
cayó, fue rodando, se perdió en la ranura.
Decepcionada y triste siguió su camino
buscando otra isla que estuviese poblada
no la hacía feliz la existencia del hombre
lo más importante, que estuviera plantada.
Ya nada se supo del final de esta historia
no quedaron registros si lo pudo lograr
si había otras islas que tuvieran plantitas
donde hacer su nido y poderlo anidar.
Mientras tanto en la isla, se quedó la semilla
se adhirió firmemente a la roca y allí germinó
la regaban las gotas de las aguas saladas
y las gotas de lluvia que en invierno llegó.
Creció débilmente, pero emitió bella flor
en la roca desnuda solamente estaba ella
irradiando en su entorno sus propios colores:
era un mundo sin flores y abundaba la estrella.
Llegaron pintores a inmortalizar su imagen
y también colibríes a sorber su dulzor.
después un poeta le creó algunos versos
que narraran la historia de esta bella flor.
Nueva Imperial, 24 agosto 2023
Bertoldo Herrera Gitterman
Tomado del poemario “Loas al Señor Sol”
Enviado por beache
PIZZAS
Estaba una pizza llorando en el cementerio, llega otra pizza y le dice:
- ¿Era familiar?
- No, era mediana..
nunca jueges con los sentimientos de otras personas solo por no saber que aser con los tuyos
Bryant Alayo
Te vi y en un segundo
Los sueños empezaron a volar
Te conquistaba, me casaba
Muchos hijos y un hogar.
De pronto el tren paró
Te perdiste entre la gente
Toda mi vida soñada
Se deshizo de repente!!
juan romero
EN UNA ISLA LEJANA: UNA FLOR
EN UNA ISLA LEJANA: UNA FLOR
Más allá de estos cielos, muy lejos de aquí
donde el sol se oculta durante la noche
a recargar sus pilas, a llenarse de luz
y poder continuar con su diario derroche.
Había una pequeña isla solitaria
que el mar con todas sus aguas bañaba
partiendo las rocas que la recubrían
llevando la chica, la grande quedaba.
Un ave volando se hallaba cansada
al ver esa isla se dirige hacia allá
llevaba en su pico pequeña semilla
si la come en el vuelo, se le caerá.
Posó como siempre en la parte más alta
donde suele encontrarse la roca más dura
y al intentar comerse la pequeña semilla
cayó, fue rodando, se perdió en la ranura.
Decepcionada y triste siguió su camino
buscando otra isla que estuviese poblada
no la hacía feliz la existencia del hombre
lo más importante, que estuviera plantada.
Ya nada se supo del final de esta historia
no quedaron registros si lo pudo lograr
si había otras islas que tuvieran plantitas
donde hacer su nido y poderlo anidar.
Mientras tanto en la isla, se quedó la semilla
se adhirió firmemente a la roca y allí germinó
la regaban las gotas de las aguas saladas
y las gotas de lluvia que en invierno llegó.
Creció débilmente, pero emitió bella flor
en la roca desnuda solamente estaba ella
irradiando en su entorno sus propios colores:
era un mundo sin flores y abundaba la estrella.
Llegaron pintores a inmortalizar su imagen
y también colibríes a sorber su dulzor.
después un poeta le creó algunos versos
que narraran la historia de esta bella flor.
Nueva Imperial, 24 agosto 2023
Bertoldo Herrera Gitterman
Tomado del poemario “Loas al Señor Sol”
Enviado por beache
PIZZAS
Estaba una pizza llorando en el cementerio, llega otra pizza y le dice:
- ¿Era familiar?
- No, era mediana..
nunca jueges con los sentimientos de otras personas solo por no saber que aser con los tuyos
Bryant Alayo
Te vi y en un segundo
Los sueños empezaron a volar
Te conquistaba, me casaba
Muchos hijos y un hogar.
De pronto el tren paró
Te perdiste entre la gente
Toda mi vida soñada
Se deshizo de repente!!
juan romero